-Mal asunto Sandi, esos ojitos..- dijo Justin riendo.
Yo lo miré y sonreí y volví a mirar a Sandi.
-¿Qué cosita?-repitió con una sonrisa.
-Em... yo quiero que Christian venga a Miami ¿no? y tú piensas que no... que no es buena idea.
-Ajá- musitó mirándo a Christian.
-Pues... bueno, he pensado que... tal vez., tú... te gustaría..- hice una pausa- ¿te apetecería venir a Miami?-pregunté y la miré.
-¿Y yo no?-preguntó Christian.
-De eso se trata inútil-murmuró Justin riendo.
-Bueno.. en realidad, me apetece mucho que vengáis.
Sandi alzó las cejas y se mordió el labio, yo la miré esperando una respuesta.
-¿Te gustaría?-volví a preguntar.
-Pues..-la interrumpí
-Sandi, por favor.. quiero que vengáis todos, y bueno..
seguro que te lo pasas bien.
-Es que..-la volví a interrumpir.
-Tú sabes mas que nadie todo lo que echaré de menos a mi madre... si vienes... se me hará menos duro.
-Naira..-la volví a interrumpir.
-Me gustaría que vinieras.. de verdad que me gustaría.
-¡déjame hablar por favor!-exclamó y rió.
Acto seguido se sentó en el regazo del sofá y me acarició el pelo.
-Naira.... me encanta que me invites y que me digas esas cosas..
pero, tal vez, debería ser tu madre la que vaya.
-No.. no quiero que vaya.
-Sí quieres
-Bueno, pero quiero que vengas tú ahora- murmuré.
¿no vendrás?-pregunté.
Ella sonrió y me acarició la mejilla.
-Naira, sí es importante para ti, ¡claro que iré!
pero solo quiero que recapacites sobre lo de tu madre.
-Oh muchas muchas muchas gracias- murmuré y la abracé.
Ella rió y me frotó la espalda con las manos.
-pero... llama a tu madre- dijo con un dedo en alto.
-No... llámala tú- dije y sonreí.
-No- dijo y sacudió la cabeza.
-Eso significa que.. ¡ME VOY A MIAMI!-murmuró Christian.
Sandi se separó de mí y me picó el ojo, luego se fue a la cocina.
-¡Eres la mejor!-exclamó Christian y se puso encima mía.
-Christian, que tiene fiebre- dijo Justin.
-¡cuánto te quiero!- volvió a decir y me besó la mejilla.
-Basta ya- murmuró Justin y lo cogió de la camisa.
Christian se levantó y comenzaron a pelearse en plan broma.
Yo me levanté y enseguida pararon de jugar, yo los miré y me dirige hacia las escaleras.
-¿A donde vas?-preguntó Justin.
-A el cuarto de Caitlin- murmuré y subí las escaleras.
Escuché como ellos empezaron a pelear de nuevo y sonreí para mis adentros.. ¡como me gustaba estar aquí!
Yo lo miré y sonreí y volví a mirar a Sandi.
-¿Qué cosita?-repitió con una sonrisa.
-Em... yo quiero que Christian venga a Miami ¿no? y tú piensas que no... que no es buena idea.
-Ajá- musitó mirándo a Christian.
-Pues... bueno, he pensado que... tal vez., tú... te gustaría..- hice una pausa- ¿te apetecería venir a Miami?-pregunté y la miré.
-¿Y yo no?-preguntó Christian.
-De eso se trata inútil-murmuró Justin riendo.
-Bueno.. en realidad, me apetece mucho que vengáis.
Sandi alzó las cejas y se mordió el labio, yo la miré esperando una respuesta.
-¿Te gustaría?-volví a preguntar.
-Pues..-la interrumpí
-Sandi, por favor.. quiero que vengáis todos, y bueno..
seguro que te lo pasas bien.
-Es que..-la volví a interrumpir.
-Tú sabes mas que nadie todo lo que echaré de menos a mi madre... si vienes... se me hará menos duro.
-Naira..-la volví a interrumpir.
-Me gustaría que vinieras.. de verdad que me gustaría.
-¡déjame hablar por favor!-exclamó y rió.
Acto seguido se sentó en el regazo del sofá y me acarició el pelo.
-Naira.... me encanta que me invites y que me digas esas cosas..
pero, tal vez, debería ser tu madre la que vaya.
-No.. no quiero que vaya.
-Sí quieres
-Bueno, pero quiero que vengas tú ahora- murmuré.
¿no vendrás?-pregunté.
Ella sonrió y me acarició la mejilla.
-Naira, sí es importante para ti, ¡claro que iré!
pero solo quiero que recapacites sobre lo de tu madre.
-Oh muchas muchas muchas gracias- murmuré y la abracé.
Ella rió y me frotó la espalda con las manos.
-pero... llama a tu madre- dijo con un dedo en alto.
-No... llámala tú- dije y sonreí.
-No- dijo y sacudió la cabeza.
-Eso significa que.. ¡ME VOY A MIAMI!-murmuró Christian.
Sandi se separó de mí y me picó el ojo, luego se fue a la cocina.
-¡Eres la mejor!-exclamó Christian y se puso encima mía.
-Christian, que tiene fiebre- dijo Justin.
-¡cuánto te quiero!- volvió a decir y me besó la mejilla.
-Basta ya- murmuró Justin y lo cogió de la camisa.
Christian se levantó y comenzaron a pelearse en plan broma.
Yo me levanté y enseguida pararon de jugar, yo los miré y me dirige hacia las escaleras.
-¿A donde vas?-preguntó Justin.
-A el cuarto de Caitlin- murmuré y subí las escaleras.
Escuché como ellos empezaron a pelear de nuevo y sonreí para mis adentros.. ¡como me gustaba estar aquí!
*NARRA JUSTIN*
Me resultaba difícil estar lejos de ella, parecía un baboso, un novio baboso, pero.. era imposible no estar cerca de ella.
Pensé en todo lo que había hecho para tenernos a todos en Miami, ¿de verdad me merecía alguien así?
A veces pienso que es demasiado para mí.
pero todo eso me daría igual, no me iría de su lado como los chicos estúpidos que lo hacen y les dicen: "no te merezco, eres demasiado buena para mí", ya claro, lo típico.
Yo no haría eso...¿a quien se le ocurre?
No podría separarme de Naira, ni aunque fuera buena para mí.
Me dispuse a subir las escaleras pero retrocedí.
Cogí mi móvil sin pensármelo y marqué el número de Raquel.
-¿Sí?-contestó una voz que no era la de la madre de Naira.
-Hola, ¿Está Raquel?-pregunté.
-¿Eres Justin?
-Sí... ¿y tú?
-OH DIOS MÍO-gritó y luego se relajó- Soy Marta.
-¿ Cuando dejarás de hacer eso?-pregunté mientras reía.
-Cuando tu dejes de aparecer así de la nada, perdona que no esté preparada para que me llame Justin Bieber- dijo riendo.
-oh, lo siento- dije riendo.
¿puedes pasarme con Raquel preciosa?
-Yo... he... no está ahora- murmuró.
-MMMM- dije sonriendo mientras notaba lo nerviosa que se había puesto- ¿puedes dejarle un mensaje?
-Sí
-Es que.. no nos hemos ido a Miami, porque Naira tiene fiebre.
Nos iremos mañana.. y me gustaría hablar con ella antes.
-¿Por qué no vienes al hotel?-preguntó.
-pero...¿a que hora vuelve ella?
-Ahora mismo- murmuró.
-Bueno... pues ahora voy, oye Marta..
-Dime.
-Intenta no decirlo, no quiero que se llene eso de gente.
-Va..vale- tartamudeó.
-Hasta ahora guapa- dije y colgué.
A lo mejor a Naira le molestaba que fuera al hotel y que Marta estuviera allí.. pero bueno al final y al cabo, ¿era una belieber no?
tenía todo el derecho del mundo a ser amable con ella.
Pero.. por si acaso no se lo diría.
Tan solo iba a ir a hablar con su madre y volvería..supongo que eso tampoco le gustaría, pero ¿que puedo hacer?
Me resultaba difícil estar lejos de ella, parecía un baboso, un novio baboso, pero.. era imposible no estar cerca de ella.
Pensé en todo lo que había hecho para tenernos a todos en Miami, ¿de verdad me merecía alguien así?
A veces pienso que es demasiado para mí.
pero todo eso me daría igual, no me iría de su lado como los chicos estúpidos que lo hacen y les dicen: "no te merezco, eres demasiado buena para mí", ya claro, lo típico.
Yo no haría eso...¿a quien se le ocurre?
No podría separarme de Naira, ni aunque fuera buena para mí.
Me dispuse a subir las escaleras pero retrocedí.
Cogí mi móvil sin pensármelo y marqué el número de Raquel.
-¿Sí?-contestó una voz que no era la de la madre de Naira.
-Hola, ¿Está Raquel?-pregunté.
-¿Eres Justin?
-Sí... ¿y tú?
-OH DIOS MÍO-gritó y luego se relajó- Soy Marta.
-¿ Cuando dejarás de hacer eso?-pregunté mientras reía.
-Cuando tu dejes de aparecer así de la nada, perdona que no esté preparada para que me llame Justin Bieber- dijo riendo.
-oh, lo siento- dije riendo.
¿puedes pasarme con Raquel preciosa?
-Yo... he... no está ahora- murmuró.
-MMMM- dije sonriendo mientras notaba lo nerviosa que se había puesto- ¿puedes dejarle un mensaje?
-Sí
-Es que.. no nos hemos ido a Miami, porque Naira tiene fiebre.
Nos iremos mañana.. y me gustaría hablar con ella antes.
-¿Por qué no vienes al hotel?-preguntó.
-pero...¿a que hora vuelve ella?
-Ahora mismo- murmuró.
-Bueno... pues ahora voy, oye Marta..
-Dime.
-Intenta no decirlo, no quiero que se llene eso de gente.
-Va..vale- tartamudeó.
-Hasta ahora guapa- dije y colgué.
A lo mejor a Naira le molestaba que fuera al hotel y que Marta estuviera allí.. pero bueno al final y al cabo, ¿era una belieber no?
tenía todo el derecho del mundo a ser amable con ella.
Pero.. por si acaso no se lo diría.
Tan solo iba a ir a hablar con su madre y volvería..supongo que eso tampoco le gustaría, pero ¿que puedo hacer?
*NARRA NAIRA*
Al cabo de abrir unas cuántas puertas, encontré la de Caitlin,
sí... la casa es un poco gigante.
Parecía no haberse enterado de que habíamos llegado, porque estaba escuchando música con los cascos.
Yo reí, pero no me escuchó, tenía el volumen demasiado alto, me senté en la cama y ella se dio la vuelta, cuando me vió pegó un salto en si misma que me hizo estallar de la risa.
-¡No vuelvas a hacer eso!- dijo mientras reía.
-Te quedarás sorda un día- mascullé cogiéndo los cascos.
Ella rió y me los puso, luego puso la canción de <<Teach me how to dougie>> ¿Quien no la conoce?
He de reconocer, que escuchar esa canción con esos grandes cascos, me hizo levantarme de la cama y comenzar a bailar como una tonta, mientras Caitlin se retorcía de risa en la cama.
Yo me eché el pelo hacia atrás y comencé a bailar... pero a lo tonto, solo para hacerla reír.
Ella se reía de una manera exagerada, y me di cuenta que.. yo no era tan graciosa, pues no se reía de mí.
Cuando me dí la vuelta, observé a TODOS, sí sí a TODOS mirándome con cara de asustados.
Estaba Sandi, Christian, Chaz, Ryan, Will (padre de Los Beadles), y Justin, en la puerta, veía como movían los labios y se reían, pero no podía escuchar lo que estaban diciendo.
Yo me senté en la cama y no podía parar de reír.
Los chicos entraron y se sentaron mientras Sandi y Will se fueron, dijeron a donde pero no oí nada.
Dejé de ser el centro de atención por lo que di gracias, pero de vez en cuando me miraban y se reían.
Justin se puso delante de mí e intentó quitarme los cascos pero yo me aparté hacia atrás.
Justin sonrió de una manera especial y yo negué con la cabeza.
Él comenzó a hablar y yo no paraba de reír.
Él señaló sus labios y luego comenzó a moverlos despacio.
Yo negué la cabeza, diciéndole que no le entendía.
Chaz nos miró y sacudió la cabeza, pensando que estábamos locos, y en realidad no se equivocaba.
Él me cogió de las manos y eso si lo entendí
dibujó en sus labios: te quiero.
Yo sonreí y me quité los cascos, acto seguido me tiré encima de él y los dos caímos a la cama.
-yo también te quiero- dije y le besé.
-escúcha...-dijo sonriendo.
Yo me incorporé y lo miré, él me cogió la mano y suspiró.
-Voy a salir un segundo.
-¿Un segundo?-pregunté y reí.
-No, en realidad un poco mas de eso- dijo sonriendo.
-¿A donde vas?-pregunté.
-Voy a... voy con Scooter- dijo él.
Conocía bien a Justin, su mano jugaba con la mía y me miraba tiernamente, me daba la impresión de que estaba mintiéndome..
pero bueno..¿porqué iba a hacerlo?
-Vale- dije y sonreí.
-Y deja de bailar así que tienes fiebre- dijo y rió.
-Ya bueno.. no me siento mal- dije y reí.
Justin suspiró de nuevo y yo le levanté la cabeza.
-¿Por qué suspiras?-pregunté mientras acariciaba su mejilla.
-Te quiero mucho- susurró.
Yo lo miré y reí.
-¿Y por eso suspiras?
-A veces me asusto a mi mismo...
-¿De qué hablas?
Él rió y me besó.
-No te asustes, quiero decir que a veces pienso que... dependo de tí-musitó y pegó nuestras frentes.
-¿Y eso es malo?-susurré.
-No.. supongo que no.
Pero... creo que lo hago demasiado, quiero decir..
no me imagino una vida en la que tú no estés.
-Estaré siempre que tú quieras.
-Ya... pero, ¿y si pasa algo malo?
-No es necesario que pase nada.
-Claro que no es necesario, pero me refiero a nosotros.
-Bueno.. no sé, está claro que yo no te olvidaré nunca.
Puede que con el tiempo esto... no funcione, nosotros no lo sabemos, ¿quien lo sabe?
-No digas eso.
-Justin, tienes 16 años, yo tengo 15.
No sabemos lo que nos depara el futuro.
-¿Qué insinúas?
-No me malinterpretes.
-Naira, te he dado mucho, te he entregado mi corazón, mi.. bueno, todo lo que eso conlleva.
He roto promesas muy importantes para mí por ti.
-¿Me estás culpando de arrebatarte tu virginidad?-pregunté.
Él rió fuertemente y sacudió la cabeza.
-Yo, te la concedí, pero.. si yo no creyera..
si yo no SUPIERA que esto es especial no lo hubiera hecho.
-No te creas que yo me iba tirando a todo el mundo- dije y reí.
-Lo sé, y me gusta ser el primero.
-Bueno... el único- dije y sonreí.
Justin sonrió y me abrazó fuertemente.
-Tengo que irme-susurró en mi oído.
-No.. intenta no tardar- murmuré y él rió.
-Estaré aquí en 1 hora-dijo y me picó el ojo.
-¿UNA HORA?
-Bueno.. 50 minutos- yo lo miré- 40...
-Estoy malita- dije y puse ojitos.
Él me miró y se acercó.
-En 3 minutos estoy aquí- susurró y me besó.
Yo reí y enredé mis manos en sus pelo,
-En media hora vuelvo, ¿vale?-preguntó.
Yo asentí varias veces y lo besé por última vez.
Sí lo sé, que melodramática, pero en fin.
Intenté no mirar el reloj, me ordené a mi misma no mirar el reloj, no iba a volverme una desquiciada contando los minutos.
Me conecté al twiter y estuve respondiendo a todas las menciones de las fans, y de la gente "importante"
ví uno que me llamó la atención:
Mañana rumbo a Miami con mis mejores amigos.. y mi madre!
gracias a @NairaPérez y sus gran dote de convencer a mi madre.
Yo reí y retwitée el tweet de Christian.
@litleCBeadles eso requiere mucho esfuerzo, me debes una!
no puedo esperar para mañana :)
Era absurdo tenía a Christian justo a lado pero eso lo hacía mas "apasionante".
Cerré el portátil y miré la hora.. eran las 11 y 2 minutos.
Suspiré y me puse al lado de Chaz, él se sentó bien, y yo puse mi cabeza en sus piernas mientras me acariciaba el pelo.
-Vamos a montar una fiesta en MIAMI-dijo Christian.
-Déjate de fiestas- dijo Caitlin- lo primero va a ser- dijo y me miró-
-¡IR DE COMPRAS!- continué la frase y reímos.
Christian cogió una almohada y le pegó a Caitlin...
y ella empezó a correr detrás suya.. y al final solo quedábamos yo y Chaz en la cama mientras los demás correteaban por allí.
-Yo sé que nos quieres mucho y eso.. pero ¿porqué has hecho esto?-preguntó Chaz.
Yo me puse boca arriba y le miré a la cara.
-Porque.. no te lo diré- dije y reí-
-Vamos, te conozco tanto que sé que tiene que ver con la chiquilla esa amiga tuya.
-Marta.. sí.. es que, no quiero que ande cerca.
-¿Por qué? ¿Es de la mafia?-dijo y rió.
-Pues espero que no- dije riendo yo también.
-¿Que nos quieres proteger o algo así?-bromeó.
-Soy una paranoica, lo sé... pero no quiero, no quiero que ande cerca y punto- dije y crucé los brazos.
-Eres una caprichosa.
-¿A caso no quieres venir?-pregunté y alcé las cejas.
-Sí
-No, ahora te quedas- dijo y reí.
-Será una buena oportunidad para estar todos juntos, hace tiempo que no lo hacemos.
-Gracias a mi- dije y sonreí.
-Sí bueno, eres una buena amiga.
-Lo sé.
-No te lo creas tanto- dijo y me despeinó.
-No sé como pudiste llegarme a gustar- dije y acto seguido me di en la frente ¿que acababa de hacer?
Chaz me miró y se rió fuertemente, iba a decir algo pero le tape la boca con la mano.
-No hagas ningún comentario, por favor- dije riendo.
él me quitó la mano y me miró.
-Sé que soy atractivo.
-Sí bueno, o te lo creas tanto- dije remendeándole.
-Oh.. te gusté ehhhhhhhh- dijo riendo.
-¡Para! fue cuando vivía en España y no duró mas de 1 semana.
Ahí supe que mi amor hacia a ti no era verdadero- bromee.
-Bueno pero te he gustado eeeeeeeh- repitió.
-¿Quieres parar?
-No- rió- es muy divertido. ¿Te imaginas tu y yo..?
-Déjalo Chaz- djie y reí.
-Sería muy raro.. ¿te estoy rompiendo el corazón?-bromeó.
-Mas quisieras- dije y le despeiné.
-Bueno si te sirve de consuelo, cuando te vi
también me gustaste bastante- dijo y rió.
-Chaz no bromees- dije y sacudí la cabeza.
-Oye, es enserio- dijo y paró de reírse.
Yo lo miré a los ojos y el asintió.
-Que tierno-mascullé.
-Si, pero al igual que tú, cuando supe las intenciones de Justin contigo, mi amor hacia ti desapareció- dijo riendo.
-Me conformo con ser especial- dije y sonreí.
-Pues sí, lo eres... eres muy especial-susurró y yo lo miré.
-y tú eres el mejor amigo del muuuuuuuundo- dije y le abracé.
-Lo sé- dijo mientras me devolvía el abrazo.
Chaz... Chaz era maravilloso.
¿De verdad le había llegado a gustar?
Nunca se me pasó por la cabeza... siempre he pensado que era muy simple como para gustarle a Chaz.
Supongo que causé tanto furor porque llegué de imprevisto... no sé lo nuevo siempre suele llamar la atención.
¿A quie no le pasa?
estás en clase con la misma gente, con los mismos chicos, cansada de verles la misma cara todos los días y cuando llega uno nuevo, todo el mundo habla con él.
Lo vez guapo pero al cabo del curso lo vez igual que a lo otros.
¡LO TIPICO!
Y respecto a su pregunta.. sí me había imaginado con él.
Era totalmente la clase de chico que iba conmigo.. antes de conocer a él amor de mi vida.
Al cabo de abrir unas cuántas puertas, encontré la de Caitlin,
sí... la casa es un poco gigante.
Parecía no haberse enterado de que habíamos llegado, porque estaba escuchando música con los cascos.
Yo reí, pero no me escuchó, tenía el volumen demasiado alto, me senté en la cama y ella se dio la vuelta, cuando me vió pegó un salto en si misma que me hizo estallar de la risa.
-¡No vuelvas a hacer eso!- dijo mientras reía.
-Te quedarás sorda un día- mascullé cogiéndo los cascos.
Ella rió y me los puso, luego puso la canción de <<Teach me how to dougie>> ¿Quien no la conoce?
He de reconocer, que escuchar esa canción con esos grandes cascos, me hizo levantarme de la cama y comenzar a bailar como una tonta, mientras Caitlin se retorcía de risa en la cama.
Yo me eché el pelo hacia atrás y comencé a bailar... pero a lo tonto, solo para hacerla reír.
Ella se reía de una manera exagerada, y me di cuenta que.. yo no era tan graciosa, pues no se reía de mí.
Cuando me dí la vuelta, observé a TODOS, sí sí a TODOS mirándome con cara de asustados.
Estaba Sandi, Christian, Chaz, Ryan, Will (padre de Los Beadles), y Justin, en la puerta, veía como movían los labios y se reían, pero no podía escuchar lo que estaban diciendo.
Yo me senté en la cama y no podía parar de reír.
Los chicos entraron y se sentaron mientras Sandi y Will se fueron, dijeron a donde pero no oí nada.
Dejé de ser el centro de atención por lo que di gracias, pero de vez en cuando me miraban y se reían.
Justin se puso delante de mí e intentó quitarme los cascos pero yo me aparté hacia atrás.
Justin sonrió de una manera especial y yo negué con la cabeza.
Él comenzó a hablar y yo no paraba de reír.
Él señaló sus labios y luego comenzó a moverlos despacio.
Yo negué la cabeza, diciéndole que no le entendía.
Chaz nos miró y sacudió la cabeza, pensando que estábamos locos, y en realidad no se equivocaba.
Él me cogió de las manos y eso si lo entendí
dibujó en sus labios: te quiero.
Yo sonreí y me quité los cascos, acto seguido me tiré encima de él y los dos caímos a la cama.
-yo también te quiero- dije y le besé.
-escúcha...-dijo sonriendo.
Yo me incorporé y lo miré, él me cogió la mano y suspiró.
-Voy a salir un segundo.
-¿Un segundo?-pregunté y reí.
-No, en realidad un poco mas de eso- dijo sonriendo.
-¿A donde vas?-pregunté.
-Voy a... voy con Scooter- dijo él.
Conocía bien a Justin, su mano jugaba con la mía y me miraba tiernamente, me daba la impresión de que estaba mintiéndome..
pero bueno..¿porqué iba a hacerlo?
-Vale- dije y sonreí.
-Y deja de bailar así que tienes fiebre- dijo y rió.
-Ya bueno.. no me siento mal- dije y reí.
Justin suspiró de nuevo y yo le levanté la cabeza.
-¿Por qué suspiras?-pregunté mientras acariciaba su mejilla.
-Te quiero mucho- susurró.
Yo lo miré y reí.
-¿Y por eso suspiras?
-A veces me asusto a mi mismo...
-¿De qué hablas?
Él rió y me besó.
-No te asustes, quiero decir que a veces pienso que... dependo de tí-musitó y pegó nuestras frentes.
-¿Y eso es malo?-susurré.
-No.. supongo que no.
Pero... creo que lo hago demasiado, quiero decir..
no me imagino una vida en la que tú no estés.
-Estaré siempre que tú quieras.
-Ya... pero, ¿y si pasa algo malo?
-No es necesario que pase nada.
-Claro que no es necesario, pero me refiero a nosotros.
-Bueno.. no sé, está claro que yo no te olvidaré nunca.
Puede que con el tiempo esto... no funcione, nosotros no lo sabemos, ¿quien lo sabe?
-No digas eso.
-Justin, tienes 16 años, yo tengo 15.
No sabemos lo que nos depara el futuro.
-¿Qué insinúas?
-No me malinterpretes.
-Naira, te he dado mucho, te he entregado mi corazón, mi.. bueno, todo lo que eso conlleva.
He roto promesas muy importantes para mí por ti.
-¿Me estás culpando de arrebatarte tu virginidad?-pregunté.
Él rió fuertemente y sacudió la cabeza.
-Yo, te la concedí, pero.. si yo no creyera..
si yo no SUPIERA que esto es especial no lo hubiera hecho.
-No te creas que yo me iba tirando a todo el mundo- dije y reí.
-Lo sé, y me gusta ser el primero.
-Bueno... el único- dije y sonreí.
Justin sonrió y me abrazó fuertemente.
-Tengo que irme-susurró en mi oído.
-No.. intenta no tardar- murmuré y él rió.
-Estaré aquí en 1 hora-dijo y me picó el ojo.
-¿UNA HORA?
-Bueno.. 50 minutos- yo lo miré- 40...
-Estoy malita- dije y puse ojitos.
Él me miró y se acercó.
-En 3 minutos estoy aquí- susurró y me besó.
Yo reí y enredé mis manos en sus pelo,
-En media hora vuelvo, ¿vale?-preguntó.
Yo asentí varias veces y lo besé por última vez.
Sí lo sé, que melodramática, pero en fin.
Intenté no mirar el reloj, me ordené a mi misma no mirar el reloj, no iba a volverme una desquiciada contando los minutos.
Me conecté al twiter y estuve respondiendo a todas las menciones de las fans, y de la gente "importante"
ví uno que me llamó la atención:
Mañana rumbo a Miami con mis mejores amigos.. y mi madre!
gracias a @NairaPérez y sus gran dote de convencer a mi madre.
Yo reí y retwitée el tweet de Christian.
@litleCBeadles eso requiere mucho esfuerzo, me debes una!
no puedo esperar para mañana :)
Era absurdo tenía a Christian justo a lado pero eso lo hacía mas "apasionante".
Cerré el portátil y miré la hora.. eran las 11 y 2 minutos.
Suspiré y me puse al lado de Chaz, él se sentó bien, y yo puse mi cabeza en sus piernas mientras me acariciaba el pelo.
-Vamos a montar una fiesta en MIAMI-dijo Christian.
-Déjate de fiestas- dijo Caitlin- lo primero va a ser- dijo y me miró-
-¡IR DE COMPRAS!- continué la frase y reímos.
Christian cogió una almohada y le pegó a Caitlin...
y ella empezó a correr detrás suya.. y al final solo quedábamos yo y Chaz en la cama mientras los demás correteaban por allí.
-Yo sé que nos quieres mucho y eso.. pero ¿porqué has hecho esto?-preguntó Chaz.
Yo me puse boca arriba y le miré a la cara.
-Porque.. no te lo diré- dije y reí-
-Vamos, te conozco tanto que sé que tiene que ver con la chiquilla esa amiga tuya.
-Marta.. sí.. es que, no quiero que ande cerca.
-¿Por qué? ¿Es de la mafia?-dijo y rió.
-Pues espero que no- dije riendo yo también.
-¿Que nos quieres proteger o algo así?-bromeó.
-Soy una paranoica, lo sé... pero no quiero, no quiero que ande cerca y punto- dije y crucé los brazos.
-Eres una caprichosa.
-¿A caso no quieres venir?-pregunté y alcé las cejas.
-Sí
-No, ahora te quedas- dijo y reí.
-Será una buena oportunidad para estar todos juntos, hace tiempo que no lo hacemos.
-Gracias a mi- dije y sonreí.
-Sí bueno, eres una buena amiga.
-Lo sé.
-No te lo creas tanto- dijo y me despeinó.
-No sé como pudiste llegarme a gustar- dije y acto seguido me di en la frente ¿que acababa de hacer?
Chaz me miró y se rió fuertemente, iba a decir algo pero le tape la boca con la mano.
-No hagas ningún comentario, por favor- dije riendo.
él me quitó la mano y me miró.
-Sé que soy atractivo.
-Sí bueno, o te lo creas tanto- dije remendeándole.
-Oh.. te gusté ehhhhhhhh- dijo riendo.
-¡Para! fue cuando vivía en España y no duró mas de 1 semana.
Ahí supe que mi amor hacia a ti no era verdadero- bromee.
-Bueno pero te he gustado eeeeeeeh- repitió.
-¿Quieres parar?
-No- rió- es muy divertido. ¿Te imaginas tu y yo..?
-Déjalo Chaz- djie y reí.
-Sería muy raro.. ¿te estoy rompiendo el corazón?-bromeó.
-Mas quisieras- dije y le despeiné.
-Bueno si te sirve de consuelo, cuando te vi
también me gustaste bastante- dijo y rió.
-Chaz no bromees- dije y sacudí la cabeza.
-Oye, es enserio- dijo y paró de reírse.
Yo lo miré a los ojos y el asintió.
-Que tierno-mascullé.
-Si, pero al igual que tú, cuando supe las intenciones de Justin contigo, mi amor hacia ti desapareció- dijo riendo.
-Me conformo con ser especial- dije y sonreí.
-Pues sí, lo eres... eres muy especial-susurró y yo lo miré.
-y tú eres el mejor amigo del muuuuuuuundo- dije y le abracé.
-Lo sé- dijo mientras me devolvía el abrazo.
Chaz... Chaz era maravilloso.
¿De verdad le había llegado a gustar?
Nunca se me pasó por la cabeza... siempre he pensado que era muy simple como para gustarle a Chaz.
Supongo que causé tanto furor porque llegué de imprevisto... no sé lo nuevo siempre suele llamar la atención.
¿A quie no le pasa?
estás en clase con la misma gente, con los mismos chicos, cansada de verles la misma cara todos los días y cuando llega uno nuevo, todo el mundo habla con él.
Lo vez guapo pero al cabo del curso lo vez igual que a lo otros.
¡LO TIPICO!
Y respecto a su pregunta.. sí me había imaginado con él.
Era totalmente la clase de chico que iba conmigo.. antes de conocer a él amor de mi vida.
*NARRA JUSTIN*
Salí de casa de Los Beadles y fui con Kenny hacia el hotel.
Cuando llegué no había mucha gente por allí.
Entré y vi a Marta a lo lejos, sin duda alguna era ella, su pelo rubio y lizo por la cintura llamaría la atención de cualquiera.
Ella me vió y sonrió mientras venía hacia mí.
Yo la abracé.
-Deja de hacer cosas inesperadas, me dará un ataque al corazón en cualquier momento- dije mientras me abrazaba.
Yo me separé y reí.
-Ahora que lo dices.. puedo escucharlo- dije y reí.
-es por tu culpa-masculló y sonrió.
-Lo sé...-reí- ¿y Raquel?-pregunté mientras me separaba.
Noté como ella se ponía nerviosa y se mordió el labio inferior, algo que me hizo recordar a Naira, me encanta que hiciera eso, sobre todo por qué lo hacía cuando estaba... bueno déjalo.
Saqué esos pensamientos de mi cabeza si no quería tener que explicar por qué me había entrado tanto calor de repente.
Miré a Marta esperando una explicación y ella mi miró con sus grandes ojos azules, yo pasé mi mano por su hombro y sonreí.
-Em... Raquel.. está..-hizo una pausa- lo cierto es que Raquel no vendrá todavía- murmuró muy rápido.
Yo fruncí el ceño y la miré.
-Es que...ha salido todo el día con tu madre, que es maravillosa-dijo y sonrió- y dijo que volvería tarde.
-Pero..¿tu no me habías dicho qué...?-me interrumpió.
-Sí, te dije que vendría porque... es que...
-¿Sí?-pregunté y sonreí.
-Por que quería verte-susurró avergonzada.
Yo aparté mi mano de su hombro y la miré.
¿Como tendría que reaccionar ahora?
Naira tenía fiebre y ella quería que viniera para verme...
en una parte era muy tierno, pero por otra.. no sé.
Tampoco me iba a ir así..¡que difícil es esto!
Yo la miré y sonreí con la mejor de mis sonrisas.
¿que mas dá? le había dicho a Naira que en media hora volvería, y aunque no estuviera con su madre... volvería en media hora.
Salí de casa de Los Beadles y fui con Kenny hacia el hotel.
Cuando llegué no había mucha gente por allí.
Entré y vi a Marta a lo lejos, sin duda alguna era ella, su pelo rubio y lizo por la cintura llamaría la atención de cualquiera.
Ella me vió y sonrió mientras venía hacia mí.
Yo la abracé.
-Deja de hacer cosas inesperadas, me dará un ataque al corazón en cualquier momento- dije mientras me abrazaba.
Yo me separé y reí.
-Ahora que lo dices.. puedo escucharlo- dije y reí.
-es por tu culpa-masculló y sonrió.
-Lo sé...-reí- ¿y Raquel?-pregunté mientras me separaba.
Noté como ella se ponía nerviosa y se mordió el labio inferior, algo que me hizo recordar a Naira, me encanta que hiciera eso, sobre todo por qué lo hacía cuando estaba... bueno déjalo.
Saqué esos pensamientos de mi cabeza si no quería tener que explicar por qué me había entrado tanto calor de repente.
Miré a Marta esperando una explicación y ella mi miró con sus grandes ojos azules, yo pasé mi mano por su hombro y sonreí.
-Em... Raquel.. está..-hizo una pausa- lo cierto es que Raquel no vendrá todavía- murmuró muy rápido.
Yo fruncí el ceño y la miré.
-Es que...ha salido todo el día con tu madre, que es maravillosa-dijo y sonrió- y dijo que volvería tarde.
-Pero..¿tu no me habías dicho qué...?-me interrumpió.
-Sí, te dije que vendría porque... es que...
-¿Sí?-pregunté y sonreí.
-Por que quería verte-susurró avergonzada.
Yo aparté mi mano de su hombro y la miré.
¿Como tendría que reaccionar ahora?
Naira tenía fiebre y ella quería que viniera para verme...
en una parte era muy tierno, pero por otra.. no sé.
Tampoco me iba a ir así..¡que difícil es esto!
Yo la miré y sonreí con la mejor de mis sonrisas.
¿que mas dá? le había dicho a Naira que en media hora volvería, y aunque no estuviera con su madre... volvería en media hora.
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