sábado, 3 de septiembre de 2011

Capítulo 108: ¿que se pensaba que era una tenista?


-¿A donde?-preguntó muy alto mientras todo el mundo me miraba raro, yo sonreí falsamente y cogí a Dan del brazo.
-¿Tengo que grabar delante de toda esta gente?-susurré mientras lo miraba,Dan se echó a reír y la gente volvió a mirarme.
-¿Qué importa?-preguntó mientras me miraba sonriendo.
-Pues mucho.. ¡no conozco a nadie!-murmuré mientras hablaba lo mas bajo posible, entonces Justin se acercó a nosotros.
-¿Podemos hablar un momento?-preguntó mientras me miraba.
-Habla-murmuré mientras me giraba para hablar con él, él miró a Dan y me cogió del brazo suavemente para sacarme fuera de esa sala, me hubiera resistido si no fuera porque lo estaba deseando, cuando llegamos me solté de su brazo rápidamente.
-¿Que es lo que pasa?-pregunté una vez fuera, el sonrió.
-Eso es lo que debería de preguntarte a tí, ¿por qué no quieres grabar en este estudio? es mas grande... con mas calidad..
-No me apetece cantar delante de 5 personas a las cuales no conozco, para ti será normal porque eres Justin Bieber pero para mí no, así que si me permites...-murmuré y le dediqué una falsa sonrisa mientras estaba decidida a salir de allí, Justin volvió a cogerme del brazo y esta vez si me solté descaradamente.
-¿Por que no dejas de agarrarme?-pregunté mirándolo.
-Si vas a irte, despídete de ellos primero.
-¿Por qué no les dices que me fui y ya está?
-Naira, a ver si entiendes que son gente muy importante.
-Ah, y esa pelirroja ¿también lo es?-pregunté mientras lo miraba. su rostro permanecía serio y yo fruncía el ceño,- además si son gente tan importante ¿que es lo que hago yo aquí con ellos?
-Vas a ensuciar tu imagen-murmuró ignorando mi pregunta.
-Oh, que pena me da, ¿de verdad crees que me interese lo que piensen 4 personas y una chica a la que no conozco de nada?
te repito, que ese eres tú, no yo-mascullé con rabia y este me cogió del brazo de nuevo pero con mas fuerza, yo lo miré.
-Ah, ya empiezo a entenderlo todo.. lo que a ti te preocupa es que sea tu imagen la que ensucie ¿verdad? todo el mundo dirá: La maleducada novia de Justin Bieber que se fue del estudio mas importante de Stanford sin avisar-musité mientras lo miraba.
-Deja de decir esas tonterías de una vez-musitó apretándome.
-¡Suéltame de una vez!-exclamé y el me soltó, pero como había hecho Dan anteriormente, sacó su dedo amenazador, yo reí.
-¿Por qué no dejas de comportarte como una niña y te comportas profesionalmente por una vez en tu vida?-preguntó mientras me miraba enfurecido, mi risa de desvaneció y mi corazón empezó a latir fuertemente a causa de la rabia, él estaba indiferente.
¿A caso el no entendía que yo no quería ser una profesional?
Si fuera por querer, yo estaría en mi casa, con mi primo sano y sin paparazzis y gente agobiándome a todas horas.
Me dieron ganas de salir de allí, de romperlo todo, y de irme de Canadá con mi primo, pero lo único que hice fue apretar mis labios y entrar en esa sala sin decir nada, ni mirar a Justin.
Allí dentro todos se giraron para mirarme, y yo entré en la sala mas pequeña que se encontraba enfrente me puse los cascos y cuando empezó la música comencé a cantar, repitiendo y subiendo y bajando el tono en las partes que me indicaban.
Me habían hecho repetir el estribillo como 10 veces y ya me estaba cansando, el hombre blanco y feo que estaba al mando de todo eso, me miraba con cara de que esperaba algo más.
¿Que quería? ¿Que me cambiara la voz o qué? una vez mas apreté mis labios y me callé todo lo que tenía ganas de decir.
Justin se encontraba en una esquina de la habitación mientras cuchicheaba con Dan y esa pelirroja que se acercaba de vez en cuando, me obligué a no mirarlo demasiado, ya que no quería que me hiciera repetirlo todo desde el principio.
Ya iba a coger aire para volver a repetirlo, cuando ese hombre levantó su dedo mientras me indicaba que me acercara, yo aliviada me quité esos caros cascos y salí de esa agobiante sala.
-Perfecto, solo faltan algunas cosas y listo-murmuró el feo, yo lo miré seriamente y él me sonrió-Me gusta mucho tu voz, ¿entrenas tu voz con la profesora de Justin?-preguntó, ¿entrenar? ¿que se pensaba que era una tenista? lo ignoré y le devolví la sonrisa.
-Sí-contesté secamente mientras lo miraba, el asintió.
-Lo suponía, puedes volver en unos días.. para que veas el resultado y grabar lo que falta ¿de acuerdo? a L.A le encantará.
-Aquí estaré-murmuré intentando ser algo simpática, me giré y abrí la puerta de esa sala mientras notaba una mirada clavada en mi espalda, cerré la puerta y suspiré aliviada mientras caminaba, pasé de el ascensor y bajé las escaleras detenidamente, cuando llegué abajo me senté en un banco de por allí y crucé mis brazos.
Giré mi cabeza para mirar hacia una sala que había por allí, hasta que sentí que alguien se sentaba a mi lado, yo me volví a girar y vi a Justin sentado muy cerca de mí, le ignoré y centré toda mi atención en observar aquel lugar, hasta que noté el dedo de Justin en el dorso de mi mano, lo miré y él solo miraba mi mano, la cual retiré después de unos segundos y me levanté del banco.
-Naira..-murmuró y yo me giré para mirarlo mientras mordía mi labio, el me miró con ternura y yo estuve a punto de tirarme a sus brazos y abrazarle, pero como todas sabéis, no fue lo que hice.
-¿Que quieres? Ya lo he hecho, ya he hecho lo que querías, ¿no querías que fuera profesional?- musité y me encogí de hombros.
-Siento haber sido duro contigo solo quería que..-le interrumpí.
-¿Sabes? No me importa lo que quisieras, no me gusta nada este lugar, no me gusta tener que ser profesional pero aprenderé.. y no exactamente por que tu me lo hayas dicho-mascullé entre dientes y intenté no parpadear para que las lagrimas que se amontonaban en mis ojos no salieran.
-Ya basta Naira, yo.. solo quería que lo entendieras -murmuró levantándose del banco y extendiendo sus brazos hacia mí, yo apreté mis labios de nuevo y retrocedí, ignorando su abrazo.
-Y lo he entendido-mascullé y me giré para salir por ese sitio de una vez, cuando lo hice subí al coche con Bob, que no dijo ni una palabra, lo cual agradecí porque no sabía como iba a contestar.
Cuando Dan y Justin se subieron al coche, estuvieron hablando en todo el camino al hospital yo solo miraba al cristal.
-¿Como ha sido la experiencia Naira?-preguntó Dan, y entonces noté la mirada de Justin clavada en mi cara.
-Uf, estupenda, estoy pensando en volver mañana-mascullé sarcásticamente y todos rieron, menos Justin y yo.
-Son gente muy.. profesional-musitó Dan y yo suspiré mientras intentaba no desviar mi mirada hacia los ojos de Justin.
-¿Por qué grabamos aquí? ¿que tiene de malo nuestro estudio?-pregunté mientras dirigía mi mirada de nuevo hacia el cristal.
-Vas a componerle esa canción a el mejor, tendrás que hacerlo con los mejores y los mejores métodos ¿no crees? bueno, ya me entenderás cuando veas el resultado de tu canción.
-Si yo sabía que no debía aceptar esa estúpida apuesta-mascullé entre dientes y Dan se giró para mirarme, al igual que Justin.
-Pero la aceptaste..-murmuró Justin dulcemente, yo lo ignoré y centré toda mi atención en el cristal de ese Rang Rover.
Nadie habló mas en todo el camino, cuando llegamos al hospital, me bajé del coche y me despedí con la mano una vez que llegué a la puerta de este, entré y me dirige hacia el baño rápidamente, en el cual rompí a llorar sin saber muy bien porqué.
Bueno realmente si lo sabía, me dolía la forma en la que Justin me había hablado antes, aunque tuviera razón, lo único que hizo fue hacerme sentir mal para que tuviera el coraje para entrar allí dentro y grabar esa canción, tanto él como yo, sabemos que este no es mi mundo y si hay una cosa que no soy es profesional.
Me obligué a dejar de llorar y salir de ese cuarto de baño.
Cuando llegué allí no había nadie, por lo que me metí en la habitación de mi primo y me dejé caer en el gran sofá, aunque después de unos minutos lo sustituí por el pequeño sillón arrastrándolo hasta la cama de mi primo, fundé mi cabeza en esa cama y agarré su mano mientras no podía parar de llorar.
Aunque realmente y me sentía mal por eso, no era por mi primo por lo que lloraba, aunque me preocupada, pero no me atormentaba como para llorar así, sabía que él se sentía bien, sabía que no le dolía nada y que despertaría pronto.
Por lo que realmente lloraba y me atormentaba tenía nombre y apellido y estaba en boca de todo el mundo, todo el tiempo.
Porque sabía que tenía razón que iba a hacer la idiota al salir de ese caro estudio sin dar explicaciones, pero todo eso era bochornoso, que él tuviera que decírmelo para darme cuenta.
-Parece que está mejor ¿verdad?-preguntó su dulce voz y yo hundí la cabeza en la cama deseando que se fuera.
-¡Dios Justin! déjame en paz-exclamé mientras no podía controlar las lagrimas que caían de mis ojos, el se acercó a mí.
-No voy a irme, voy a quedarme contigo, tooooda la noche.
-Nadie te ha pedido que lo hagas-mascullé aún si mirarlo.
-Por eso es porque lo hago..-murmuró mientras se sentaba en el sofá, yo no me moví de mi sitio ni hice ademán para mirarlo.
Después de unos minutos sentí que no se movía por lo que levanté mi cabeza de la cama y me giré para mirarlo.
Él tenía su mirada fija en mí, me obligué en dejar de mirarlo, pero no pude hacerlo, él se levantó del sofá y vino a mi encuentro.
-No llores.. no quiero verte llorar..-susurró y se agachó para mirarme, yo solo apreté mis labios una vez más y lo miré- lo siento ¿vale? lo siento mucho, siento haberte hablado así, siento haberme ido de tu lado anoche, pero... deja de llorar por favor-murmuró mientras apartaba una lagrima de mi mejilla, yo me levanté de esa sillón apartando su mano de mi cara él me miró y suspiró, pude ver su cara llena de dolor, por lo que sequé las lagrimas de mis ojos y respiré hondo varias veces.
Él volvió a acercarse a mí y yo lo miré deseando que las lagrimas no volvieran de nuevo a mis ojos, sin excito alguno.
-Ya he dejado de llorar Justin, ya puedes dejar de sentirte culpable e irte de aquí -mascullé mientras lo miraba.
-No lo entiendes, no me siento culpable por hacerte llorar.
-¿Ah no?-pregunté mientras lo miraba, el sacudió su cabeza.
-Cada lagrima que cae por tu mejilla, es una puñalada en mi corazón, ¿entiendes? me duele, me duele verte sufrir, aunque sea yo o otro el causante de ello, así que... deja de llorar- me rogó mientras se acercaba a mí yo mordí mi labio intentado apartar de mi las ganas de abrazarlo de nuevo, cerré mis ojos.
-No te has portado bien conmigo..-murmuré.
-Lo sé y lo siento, lo siento, perdóname, he sido un capullo contigo y lo admito pero.. ya está, no mas estupideces ¿vale?-preguntó mientras acariciaba mi mano, yo lo miré y no pude resitirlo mas, me tiré a sus brazos con fuerza, él correspondió mi abrazo y me apretó fuertemente, mientras acariciaba mi cabeza.
Yo hundí mi cara en su pecho mientras sollozaba sin control, Justin se sentó en el sofá y me sentó encima de él, acurrucándome como si de un bebé me tratase, yo esta vez dejé mi cabeza en el hueco de su hombro y su cuello e intenté tranquilizarme y dejar de llorar, después de unos minutos, lo conseguí y levanté mi cara para mirar a Justin, el me sonrió.
-¿Ya estás mejor?-preguntó dulcemente mientas me apartaba las lagrimas de mi cara, yo apreté mis labios como una niña pequeña y rompí a llorar de nuevo estúpidamente, el rió y me acunó con fuerza de nuevo, mientras me susurraba palabras tranquilizadoras al oído, me calmé de nuevo y lo miré.
El iba a abrir la boca para decir algo pero yo le puse un dedo en sus sensuales labios mientras los acariciaba.
-Deja de hablar y bésame..-le ordené mientras no despegaba mi mirada de sus labios, Justin rió por lo bajo pero no se movió de su sitio, yo lo miré extrañada ¿no iba a besarme? entonces dirigió su mirada hacia mi primo inconsciente en la cama, yo lo miré y miré a Justin con cara de no entender un pimiento lo que intentaba decirme mirando a mi primo, el volvió a reír.
-Verás.. me da un poco de.. respeto ¿y si se despierta y nos ve ahí en mitad de la faena?-preguntó y yo apreté mis labios mientras intentaba no reírme demasiado alto, el rió conmigo.
-Bueno.. entonces tendré que explicarle que mi novio es Justin Bieber y que quiero que me bese... ahora-murmuré mientras pasaba un dedo por su pecho, el sonrió y se acercó a mí para juntar sus labios con los míos, nos buscábamos desesperadamente y no os imagináis las ganas que tenía de meterlo en el baño como la otra vez, pero esta vez, solo me separé de sus labios y junté mi frente con la suya.
-Este mundo no es para mí..-susurré y abrí los ojos para mirarlo, el frunció el ceño- este no es mi sitio Justin.
-Oye, no te lo tomes tan a pecho, lo he dicho para que grabaras la canción y ya está...-murmuró mientras me acariciaba.
-Lo sé, pero tienes razón, si hubiera sido un poco profesional hubiera entrado allí y comenzado a grabar mi canción pero..-me interrumpió juntando sus labios con los míos de nuevo.
-Tu sitio está conmigo, mi sitio está donde tú estés- murmuró y yo no pude evitar reír fuertemente, el me miró extrañado.
-No digas esas cosas tan cursis..-murmuré mientras me levantaba de encima de él, Justin mordió su labio y me miró mientras cruzaba sus brazos-¿Que pasa?-pregunté mirándolo.
-Esos pantalones te quedan muy bien..-murmuró mientras se recostaba en el sofá para mirarme bien, yo reí y me di la vuelta.
-¿Tu crees? yo creo que me hace un culo muy gordo.. ¿crees que me hace un culo muy gordo Justin?-pregunté mientras me daba la vuelta del todo y ponía mis manos en mi cintura, giré mi cabeza para mirarlo y él dejo de mirar mi trasero para mirarme a mí.
Él se levantó de el sofá y me abrazó por detrás deslizando sus manos por mi vientre, luego pasó sus manos por mi cintura y me atrajo a él con fuerza, la piel se me puso de gallina cuando Justin metió su mano por dentro de mi pantalón, yo reí por lo bajo y me di la vuelta para mirarlo, y pasé mi manos por su cuello.
-Así que..¿ te da respeto besarme y no meterme mano?-bromeé mientras reía, él sacudió la cabeza y apretó sus manos por en mi trasero, yo mordí mi labio y me acerqué a sus labios para besarle, pero en ese momento algo vibró en mi bolsillo.
Junté mi frente con la de Justin y este subió sus manos hacia mi espalda mientras me sonreía de esa manera tan.. sensual.
Saqué el móvil del bolsillo y cuando vi quien me llamaba me deshice de los brazos de Justin para contestar.
-¿Sí?-pregunté en español.
-Hola mi niña..-murmuró Luis y yo sonreí tontamente.
-¡Hola! pensé que no ibas a llamarme.
*NARRA JUSTIN*
Cuando se levantó del sofá me quedé mirándola fijamente.
-¿Que pasa?-preguntó mientras me miraba, yo le sonreí.
-Esos pantalones te quedan..muy bien- murmuré de la forma mas fina que pude, ella me miró sonriendo de una forma que me volvía loco, luego se humedeció los labios antes de hablar.
-¿Tú crees? -preguntó mientras se daba la vuelta, mi mirada se trasladó desde sus perfectas piernas hasta su trasero,ella puso sus manos en su cintura y se giró para mirarme, a la vez que su pelo se movía sensualmente, le sonreí picaramente.
Conseguí despegar mi mirada de su trasero y la miré a ella, que me miraba divertida, yo me levanté de ese sofá y la abracé por detrás mientras la atraía a mí, ella se echó un poco para atrás mientras rozaba su bolsillo trasero con la cremallera de mi pantalón, juraría que casi me vuelvo loco en esos segundos.
-Te hacen un culo perfecto si eso es lo que quieres decir..-susurré,suspiré en su oído y metí mi mano por su pantalón.
-Así que.. ¿te da respeto besarme pero no meterme mano?-preguntó mientras se daba la vuelta y se enganchaba a mi cuello mientras me acariciaba, yo deslicé mis manos por su cintura hasta llegar a su trasero él cual apreté contra mi, ella mordió su labio y tuve un impulso tremendo de levantarla en pesos, y ponerla contra la pared pero en ese momento en el que se acercaba a mi boca, se separó y juntó su frente, luego sacó su móvil del bolsillo y se separó de mi rápidamente para contestar, yo la miré extrañado y ella sonrió cuando miró el móvil de esa manera en la que solo sonreía conmigo.¿Quien cojones era ese tío? me senté en el sofá mientras la observaba hablar es español,intentaba entender algo pero la verdad que no entendí demasiado.. vale, no entendí nada. Pero a juzgar por la forma en la que caminaba nerviosamente por la habitación y jugaba con un mechón de su pelo, parecía encantada con ese tío que le llamaba, sin decir nada me levanté del sofá y salí de la habitación con la mirada de Naira clavada en mi espalda, esperé a que ella abriera la puerta y me pidiera que entrada de nuevo pero no lo hizo, por lo que me senté a fuera esperando a que terminara de hablar con dios sabe quien, mientras me comía la cabeza.
¿Quien demonios era ese tío? ¿Y por qué ya había pasado dos veces de mi para hablar con él? Esto no me gustaba nada.
Después de unos minutos ella abrió la puerta de la habitación mientras asomaba solo su cabeza, yo elevé mi vista para mirarla, y cuando su mirada se encontró con la mía, se acercó a mí.
-¿Qué haces aquí fuera?-preguntó y se paró enfrente de mí.
-Esperar-murmuré y apoyé mi espalda en la silla, ella me miró.
-¿Esperar a qué?-preguntó mientras se acercaba y se ponía entre mis piernas, yo automáticamente deslicé mis manos por su entrepierna, ¿no era que estaba enfadado? bah, que mas da.
-Esperar a que termines de hablar con ese tío tan importante por el que siempre me dejas tirado-mascullé mientras elevaba mi vista para mirarla, ella rió para sus adentros y acarició mi cabello con dulzura, luego se agachó para quedar a mi altura y al hacer eso quedó muy cerca de mí, y mis manos se deslizaron desde su entrepierna hasta su cintura, yo no me moví y ella tampoco.
-Has sido tu el que ha salido de la habitación..-murmuró y pasó una mano por mi pecho haciendo que me volviera a apoyar en la silla, luego pasó sus manos por mis muslos y me sonrió.
La verdad es que esa postura no era la mas normal en un hospital así que quité su mano y volví a ponerme como antes.
-¿Quien era?-pregunté mientras la miraba, ella bajó su mirada por mi camisa y pasó un dedo por mi pecho mientras me miraba.
-Es mi mejor amigo.. -murmuró mientras su dedo descendía por mi abdomen, yo se lo cogí y ella me miró divertida.
-Creía que ese era Rubén..-mascullé entre dientes, pensé que se enfadaría pero en vez de eso rió por lo bajo y me miró.
-Lo cierto es que.. este es mi mejor amigo de verdad, me conoce desde que nací y nos criamos juntos.. me ha enseñado muchas cosas de la vida y me ha gustado llamarle, solo eso..
-Ah, es ese ¿amigo de la familia?-pregunté mirándola.
-Así es...-musitó y se levantó para sentarse en mis piernas.
-¿Debería preocuparme?-pregunté y ella se acercó a mí, entonces sacudió su cabeza haciendo que todo su pelo se moviera a su compás y se mordió el labio mientras me miraba.
Si los celos no me estuvieran comiendo ya la abría metido en el baño, después de todo ese jueguecito de seducción.
Naira se acercó a mí boca y con la punta de su lengua recorrió todo mi labio inferior, yo tragué saliva y la miré fijamente mientras intentaba que "mi amiguito" no se pusiera demasiado contento.
-¿Que te pasa hoy?-pregunté mientras una sonrisa atravesaba mi boca, ella rió por lo bajo y se humedeció los labios.
-Es que me vuelves loca..-susurró y se acercó para besarme, pero en vez de eso se separó de mi levantándose y mirándome.
-Creo que ya he estado bastante tiempo en este hospital.. ¿me llevas a casa?-preguntó mientras se acomodaba el pelo, yo no pude despegar mi mirada de ella, ¿que era bipolar? Bufé para mis mismo y me levanté de esa silla comenzando a caminar, pero ella agarró mi mano y me miró sonriendo, si.. definitivamente era bipolar.

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