sábado, 3 de septiembre de 2011

capítulo 100: prométemelo.

Dejé de mirar al suelo y miré su cara, estaba... diferente.
Tenía la mirada fija al frente y se mordía el labio, supuse que en pocos segundos se enfadaría estallaría de rabia y comenzaría a maldecir a Rubén, por lo que decidí hablar o a intentarlo.
Tenía pensada una conversación en mi cabeza, si todo esto se tensaba demasiado, le sacaría lo de la apuesta, ¿que cojones es eso de la apuesta? Le diría si se enfadara demasiado.
Por fin mi voz volvió y me dispuse a soltar algo.. coherente.
-Yo.. no sé que decir, en realidad..todo ha sido muy raro.
Ha venido y me ha dicho muchas cosas a la vez.
Pero he llegado a la conclusión de que.. bueno no sé.
Sé que piensas que es.. malo o como quieras llamarlo, pero Justin, el no lo es, es mi amigo y.. me gustaría llevarme bien con él., no sé poder hablar con él, de vez en cuando, tal vez..
Aunque sea un estúpido.. pero, sigue siendo mi amigo, y.. yo..
¡me voy a volver loca! no sé lo que hacer, ni como comportarme, si hablo con él te hago daño a ti pero.. es que en realidad..-Justin sacudió la cabeza mientras una sonrisa se expandía por su hermoso rostro, yo lo miré sorprendida, se giró para mirarme y pasó un dedo por mis labios, luego volvió a sonreír.
-Shhhh-susurró- no me importa, es más...-musitó y metió su mano en mi bolsillo sacándome mi móvil de él- toma, llámalo.
-¿Cómo?-pregunté aún realmente sorprendida.
-Pues.. marcando los números, ¿lo tienes grabado?-preguntó mientras soltaba una leve risita y buscaba en la agenda.
Yo me quedé mirándole, él me pegó el móvil a la oreja y me sonrió de nuevo, yo conseguí cerrar la boca y colgar.
-¿Qué.. qué haces?-pregunté cuando colgué la llamada.
-Llamarlo-musitó y se encogió de hombros-¿Que pasa?
-¿Qué pasa? pues.. que, yo.. no sé, me esperaba que.. tú, ya sabes, que..-bufé y el rió levemente.
-Sí, yo también, pero.. en realidad no quiero volver a discutir contigo-susurró y me acarició la mejilla- te he dicho que no es bueno para ti, te he pedido que no hables con él, y no me has hecho caso, por enfadarme no voy a conseguir que lo hagas.
-Lo siento..¿quieres que te explique como ha sido?-pregunté.
-No, prefiero que no-rió- si tu quieres.. pues.. llevarte bien con él, como quieras, pero.. prefiero que no.. me des detalles-musitó he hizo una mueca, me costó entenderlo algo de tiempo.
-¡Oh vamos! Rubén es.. es.. mi amigo-exclamé casi riendo.
-Es un chico, y.. tú eres, tú eres tú Naira, eres cariñosa con todo el mundo, eres así, no puedo cambiarte, si.. de verdad no supiera que eres así, me pondría como un loco cada vez que abrazas o.. besas a Chaz, tú no te atas por tenerme como novio, y.. lo entiendo, solo que con Rubén, me costará.. mucho -musitó, yo lo miré mientras fruncía tanto el ceño que casi se me juntan las cejas, luego hice una mueca,¿me había llamado fresca?
-¡No no no no!-exclamó y rió- no me refería a eso-musitó, yo lo volví a mirar y este rió de nuevo y cogió mis manos- no lo entiendes Naira, no quiero obligarte a nada-susurró y me besó la palma de la mano- Sí eso.. te hace feliz, adelante-musitó y me sonrió, yo estaba realmente extrañada, pensando en sus palabras, me mordí el labio confusa, mientras Justin no apartaba los ojos de mí, estuvimos así un buen rato.
-¿Me puedes decir lo que estás pensando? me voy a volver loco-musitó y soltó una risa nerviosa, yo lo miré a los ojos.
-Pues, estoy pensando que...¿intentas hacerme sentir mal?
-¿Por qué querría hacer eso?-preguntó y abrió los ojos.
-No lo sé, yo.. sabía que rompía tus reglas hablando con Rubén, me imaginaba con lo que me encontraría y en vez de eso, me encuentro con el novio mas comprensivo del mundo-musité y me encogí de hombros, Justin volvió a reír, aunque yo no.
-¡Es que, es exactamente eso! Son mis reglas, no las tuyas, ¿quien soy yo? Soy tu novio, no tu padre, no puedo protegerte de todo y supongo que me he dado cuenta ahora.
-¡De verdad! ¡para! ¡hazlo ahora mismo!-le ordené nerviosa.
-¿Qué pare?-preguntó y frunció el ceño.
-Sí para,y dime lo que piensas, de verdad.
-Naira, ¿por qué lo haces tan complicado?-preguntó y me sonrió dulcemente, luego me besó la mejilla-es lo que pienso.
-¿De verdad?-pregunté y el rió.
-De la buena-musitó y rió de nuevo-¿puedo preguntarte algo?
-Supongo que sí-musité y lo miré a los ojos.
-Tú.. ¿Estás enamorada de mí?-preguntó, yo fruncí el ceño.
-¿Qué clase de estúpida pregunta es esa?-pregunté casi ofendida, él se mordió el labio para no reírse.
-Me lo tomo como.. ¿un sí?-preguntó, yo entrecerré los ojos-vale, vale, nunca te volveré a preguntar eso-rió- ahora ¿si la situación fuera al revés... sí estuvieras luchando para que yo no hablara con alguien que crees que me hará daño, que harías?
-No deberías preguntarme eso-mascullé-yo no soy como tú.
-¿Que harías?-repitió mientras me miraba.
-Probablemente, me enfadaría, y... ¡me siento como una estúpida egoísta por ello! tú eres.. vamos, yo no me merezco esto.
-¡No lo eres! yo también he hecho eso, me he enfadado y te he ordenado que te alejes de él, pero.. no puedo hacerlo, es como.. es como ¡si fuerais imanes!-rió- y aunque.. me disguste es así- musitó y me sonrió, yo sonreí y le dí un abrazo.
-¡Pensaba que no lo harías nunca!-exclamó, apretándome, yo me separé de él y pasé mis manos por su rostro, el se acercó a mí y me besó dulcemente, notaba como cada parte de mi cuerpo temblaba al tener sus labios entre los míos, me separé.
-Sigo pensando que no me merezco esto-susurré una vez que dejó que respiraba, Justin sonrió y me acarició la mejilla.
-Estás hecha a mi medida,Naira -susurró, yo sonreí.
-Pues yo diría que a ti te hicieron algo mas alto-bromeé y reí, Justin me dio un bocado en la mejilla y me volvió a abrazar.
-Pero, ya puedes ir diciéndole a Rubén que se olvide de acercarse demasiado porque..-yo reí y le interrumpí.
-Gracias, pero... creo que nos hemos enfadado, así que..-me encongió de hombros, Justin se separó y me miró.
-¡Podrías haberme avisado! no sabes en todas las cosas bonitas que he tenido que pensar para tomar esta desición- rió fuertemente,-No.. ahora enserio, ¿porqué?-preguntó.
-Yo.. no sé, no quiero que cambies de idea-musité y reí.
-Vamos, nada de lo que digas hará que cambie de idea.
-Pues, me ha mencionado algo de.. una apuesta-musité, Justin me miró a los ojos, yo bufé- es una tontería.. ¿no?-pregunté.
-Oh vamos,¿ no creerás que yo..?-preguntó y alzó las cejas.
-No he dicho eso, solo que.. ¿por qué iba a inventárselo?
-Bueno, a mi se me ocurran varias razones-musitó y rió.
-Si.. a mi también, pero..-me interrumpió.
-No tienes de que preocuparte, te quiero, y no hay ninguna apuesta entre nosotros, tu eres mía, y ya está- yo puse los ojos en blanco ante esa comparación, o posesión, mejor dicho.
-Quiero decir.. que estás conmigo, y él lo sabe, no hay nada mas que hablar-musitó y me sonrió, yo suspiré, el cogió mi mano y le besó de nuevo, como antes- confía en mí.
-Lo hago-le aseguré y cerré los ojos al notar sus labios en los míos, los rozó y luego se separó de mí.
-¿Te apetece dar un paseo?-preguntó, yo lo miré.
-¿Un paseo?-pregunté y alcé las cejas.
-Sí, pon emoción a tu vida, chica-bromeó y rió.
-Sí, como si no tuviera la bastante-musité, él me cogió de la mano y me levanté de la silla.
-¡Vamos! tengo que hacer varias cosas.. ¡ven conmigo!
-Oh dios mío..-susurré, Justin rió y arrastró de mí.
Salimos del hospital, y me sorprendí al no ver a nadie por allí, y cuando digo a nadie, es a nadie.
-¿Y donde está Kenny?-pregunté mientras me subía al coche.
-Hoy es su día libre-musitó y me sonrió.
-Ah vale, ahora me quedo mas tranquila..-bufé- ¿quieres que una avalancha de fans se te tiren encima?-pregunté, el rió.
-Vamos al estudio, ellas allí no pueden entrar.
-Si el problema es.. bajarse del coche, lo demás, todo bien-reí- además, ¿a que vas al estudio?-pregunté el rió mientras no apartaba la mirada de la carretera.
-¿de qué te ríes?-pregunté y él volvió a reír.
-Tú tienes que ir a estudio-murmuró y sonrió.
-¿Yo? ¿para qué?-pregunté.
-No tendré ninguna apuesta con Rubén, pero si contigo-rió.
-¡Ah! eso... pero, yo.. ¿vas a irte?-pregunté, Justin pasó su mano por mi muslo y me sonrió.
-Tengo que hacer varias cosas, amor.
-¿Amor? ¿qué te pasa?-pregunté y reí fuertemente.
-¿Por qué?-preguntó mientras me miraba.
-¿Desde cuando me dices amor?-musité y volví a reír.
-Desde que.. Naira, ¿sabes cuánto tiempo llevamos juntos?-preguntó, sin mirarme, yo dejé de reír, Justin me miró.
-¿No lo sabes?-preguntó y abrió los ojos.
-Bueno.. yo no soy mucho te contar.. pero..-hice una pausa y Justin me miró de nuevo, yo sonreí- llevamos juntos, 7 meses.
-7 meses, y tres semanas-murmuró sin dejar de mirar a la carretera, yo me acerqué a él y le besé la mejilla.
En ese momento llegamos al estudio, paró el coche y me miró fijamente, yo le devolví la mirada hasta que le sonreí, Justin cogió mi rostro entre sus manos y rozó sus labios con los míos, yo, no lo pude evitar y puse mis manos en su cuello, y aferré nuestras bocas aún más, era inexplicable, todo lo que me hacía sentir, Justin pasó su mano por mi cintura, por dentro de mi camisa, segundos después se separó de mí y pegó nuestras frentes.
-Será mejor que entres-susurró, aún con los ojos cerrados.
-¿Quieres que entre?-pregunté, Justin sonrió sin abrir los ojos aún, me acerqué a él y le besé la comisura de los labios, iba a separarme pero Justin volvió a besarme, esta vez se separó aún mas rápido, soltó un suspiro y se separó del todo.
-¿Vez por qué digo que deberías entrar?-preguntó y rió.
-Tengo tiempo para componer esa canción-le recordé.
-Dan me mataría si supiera que no te he obligado a entrar, prefiero conservar mi vida ¿sabes?-preguntó y rió.
-Está bien-musité y suspiré, luego le sonreí y me dispuse a salir del coche, pero Justin cogió mi mano.
-¿No te despides?-preguntó, yo le miré y reí.
-Ya lo he hecho-mascullé, el sacudió la cabeza y volvió a acercarse a mí, yo suspiré cuando noté su aliento tan cerca mi boca, él sonrió y de repente besó mi mejilla, luego se separó.
Yo me quedé mirándole y este me picó un ojo, yo suspiré de nuevo y salí del coche, en la puerta, estaba Bob, esperándome.
Estuve en el estudio un buen rato, probé varias melodías, escribí algún que otro verso.. pero aún no tenía nada claro.
Cuando cumplí las dos horas exactas salí de allí.
Le pedí a Bob que me llevara al hospital, al llegar ví a Pattie y mi padre, ¿pero es que mi padre no se podía quedar callado nunca?
Pattie lo miraba y le sonreía, pude ver en sus ojos que no entendía ni una palabra de lo que mi padre decía, pero sin embargo sonreía como si lo entendiera a la perfección.
Era muy divertido verlos intentando hablar, Pattie vocalizaba mucho y movía mucho las manos con el fin de que mi padre le entendiera, el asentí pero pude ver la misma expresión que había visto en la cara de Pattie segundos antes, eso era un espectáculo, en toda regla.
Cuando me acerqué mi padre me miró con cara de aliviado, y Pattie mas de lo mismo, supuso que me tocaría traducir.
Así que así fue, una traducción de una larga conversación mientras yo, solo pensaba en una cosa.
En Justin, hacía unas 3 horas que no estaba con él.
Me culpé a mi misma por tener aquel sentimiento de posesión hacía él, pero por mucho que me fastidiara, era así.
Pattie insistió en que fuera a su casa a pegarme una ducha y a despejarme, y bueno.. acepté.
Supuse que Justin me llamaría, o iría a su casa antes de ir al hospital, así que fui a casa de Pattie.
Ella me dió las llaves y me dejó en la puerta, me dijo que tenía que ir a comprar varias cosas y que entrara.
Al principio me sentí un poco rara, pero finalmente me metí en la ducha y estuve bastante tiempo allí dentro.
Justin no estaba allí pero supuse que era él cuando escuché la puerta de abajo... enseguida me apresuré a vestirme y peinarme, una vez lo hice bajé las escaleras a toda prisa.
Cuando bajé, lo ví en la cocina, estaba haciendo algo, pero no me fijé en eso, sino en su silueta allí, en la cocina, cuando me oyó bajar las escaleras se dio la vuelta y sonrió.
-Tu madre me ha dicho que te quedaras aquí esta noche.
-No hace falta, puedo quedarme en el hospital.
-No.. creo que no me entiendes-rió- me ha obligado a que te quedes aquí esta noche.
-¿Por qué?-pregunté y me apoyé en la mesa.
-No lo sé, pero yo también creo que es buena idea.
-¿Por qué?-repetí y reí.
-¿Te gustan los huevos fritos?-preguntó y me miró.
-No-musité he hice una mueca-¿Estás haciéndome la cena?-reí fuertemente-Justin, eso es innecesario, no tengo hambre.
-¡No has comido nada!-exclamó y se giró para mirarme, yo me encogí de hombros y el sonrió y se acercó a mí.
-Mi madre ha pensado que quizás deberíamos de tener algo de.. ¿intimidad?-preguntó y pasó su mano por mi mejilla.
-¿Existe eso?-pregunté y reí, Justin me sonrió y pasó sus manos por mi cintura, me subió a la mesa y me sonrió levemente.
-Sí, intimidad, pero con tu padre por aquí-rió.
-Ya pensaba yo..-reí y Justin me miró.
-Te e echado de menos-susurró y me sonrió.
-Tu querías que entrara-musité y el rió.
-¿Me acompañas?-preguntó, yo asentí y el se dió la vuelta, dándome la espalda y cogiéndome en pesos.
Subió conmigo las escaleras y nos acercamos a el baño, cuando llegamos allí, el jacuzzi estaba lleno de espuma, había velas por todas partes, Justin me soltó suavemente, y yo reí.
-¿Que es todo esto?-pregunté mientras lo miraba, asombrada.
-Hoy, hace 7 meses y tres semanas que me enamoré de ti-susurró sin dejar de mirar el lugar, yo lo miré.
-¿Celebras también las semanas?-pregunté y el rió.
-No hemos celebrado ningún aniversario, nunca.
-¿A caso hace falta? Yo lo celebro todos los días-musité y reí.
-¿No lo entiendes? nunca he estado tanto tiempo con ninguna chica, ya has marcado la diferencia-susurró y clavó su mirada en mí, yo hice lo mismo y este suspiró- sigo pensando que nada de esto es normal, ¿como es posible que pueda sentir tantas cosas a la vez por una persona tan.. ¿pequeña?-rió y luego volvió a suspirar-Hoy me ha costado estar separado de tí.. ¡3 horas! ¿vez eso normal? Estoy loco, me estoy volviendo loco por tí.
Tengo problemas, estoy agobiado, pero solo necesito tocarte, solo necesito rozar tus labios y verte sonreír para estar bien.
A veces pienso que.. es demasiado, que nada de esto vale la pena, hasta que te veo a ti, hasta que me besas, me abrazas, y me haces el chico mas feliz del mundo.
Yo me imaginé un futuro a tu lado-rió-a veces pienso.. ¿estaré enamorado? ¿o mas bien obsesionado? No puedo sacarte de mi cabeza ni un segundo, Naira-musitó y suspiró de nuevo,yo me quedé mirándolo por un momento,luego me acerqué lentamente a él, cuando por fin mis piernas reaccionaron,me acerqué hasta que mi cabeza estaba casi a la altura de su cuello.
Elevé lentamente mi vista para mirarle a los ojos, este pasó su mano por mi pelo, acariciándolo, yo cerré los ojos y me estiré hasta que mi boca se acercó a su cuello, su aroma me cubrió toda la cara y volví a besarlo de nuevo.
Justin aferró mi cara entre sus manos y me besó dulcemente, yo pasé mis manos por su camisa y las metí dentro de ella.
Justin se separó un poco de mí y me quitó la chaqueta, pegó nuestras frentes mientras bajaba sus manos a mis pantalones.
Nuestros cuerpos se coordinaban a la perfección, sus manos recorrían mi cuerpo de arriba a abajo, sin censura.
Justin me cogió en pesos y me llevó en volandas hasta la cama, una vez allí me dejó caer levemente y luego se puso encima de mí, comenzó a besarme de nuevo,suavemente.
Se desprendió de mi ropa interior y se separó para mirarme.
-Prométeme una cosa-susurró entre mis labios.
-La que quieras-susurré y Justin acarició mi mejilla.
-Prométeme que, siempre seré el único-susurró mirándome.
-¿El único?-pregunté y abrí los ojos lentamente.
-Sí, el único en tocarte y te estremezcas, el único que podrá tocarte del modo en el que lo hago, prométeme que nadie te hará el amor como yo, prométeme que serás mía, siempre-susurró mirándome a los ojos, yo suspiré- ¿me lo prometes?-preguntó,yo sonreí y asentí levemente, Justin sonrió y me acarició la cara.
Abrió mis piernas lentamente y comenzó a penetrarme, nunca antes había sido tan dulce, tan protector, como si fuera frágil.
Justin no paraba de besarme cada parte del cuerpo con sus labios mientras el ritmo iba acelerando.
Nuestros cuerpos se volvieron uno, el día en el que cumplimos 7 meses y tres semanas juntos, ¿quien iba a decirme algo así?
Nuestros cuerpos se compenetraban a la perfección el no con el otro, aún pensaba que estaba soñando y que en cualquier momento despertaría y me caería de la cama, estaría en mi casa, en España, con toda mi habitación llena de posters de Justin Bieber.Estaba en el cielo, lo podía sentir, al poco tiempo de pensarlo así fue, llegamos al orgasmo juntos y Justin se bajó de encima mí para dejarse caer a mi lado.
Me puse de lado y me acurruqué en su pecho, Justin estiró su brazo y pasó su mano por mi hombro, una y otra vez.
-Yo te he prometido algo,ahora te toca a tí-susurré.
-¿Que quieres te te prometa?-preguntó mientras seguía acariciándome, yo hice una pausa- sea lo que sea, te lo prometeré.

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